Puerto de Ibicuy retoma la exportación de ganado en pie: Entre Ríos se sube a un negocio global tras medio siglo de prohibición

Derogada la restricción nacional que impedía vender animales vivos desde 1973, la provincia adapta su puerto de aguas profundas para despachar los primeros lotes a Israel antes de fin de año y proyecta envíos a Turquía y Vietnam, con una rentabilidad estimada 25 % superior para los productores.

1. Un decreto que cambió el tablero exportador

El Gobierno nacional dejó sin efecto la prohibición de exportar ganado vacuno en pie que regía desde hace 52 años. Aquella norma, dictada en plena crisis de abastecimiento en la década de 1970, buscaba proteger a la industria frigorífica, pero había quedado anacrónica en un mercado global que hoy mueve millones de cabezas y miles de millones de dólares al año.

2. Ibicuy, la carta fuerte del litoral

Ibicuy —34 pies de calado natural, muelle multipropósito y conexión directa con la red vial nacional— es el único puerto entrerriano de aguas profundas. Operativo para cargas a granel y forestales, ahora apunta a convertirse en la primera terminal argentina especializada en embarque de hacienda viva.

IndicadorSituación actualMeta a 2026
Calado34 pies natural36 pies dragado
Capacidad de estiba30 000 t+20 %
Empleo directo diario360 trabajadores450

3. Infraestructura sanitaria y trazabilidad

La provincia aprobó un plan de obras que incluye:

  • Corralones de cuarentena para 9 000 cabezas por ciclo.
  • Sistemas de alimentación controlada y bebederos automáticos.
  • Circuito de trazabilidad con chips RFID vinculados a la base de datos del Senasa.
  • Rampa doble para carga simultánea en buques de 180 m de eslora, capaz de despachar entre 6 000 y 8 000 novillos en menos de 24 horas.

El ministro de Planeamiento entrerriano, Darío Schneider, subrayó que el objetivo es “convertir a Ibicuy en la terminal ganadera más competitiva del litoral” cumpliendo los protocolos internacionales de bienestar animal.

4. Voces del sector exportador

Matías Regalado, presidente de la Asociación Argentina de Exportadores de Ganado en Pie, confirmó que el primer embarque a Israel —8 000 terneros de 320 kg promedio— está programado para noviembre. Según el directivo, la venta de animales vivos permite a los productores cobrar hasta un 25 % más, mientras el flete fluvial reduce costos logísticos. Turquía y Vietnam ya realizaron consultas preliminares y los contratos podrían superar las 20 000 cabezas en 2026.

5. Impacto económico y productivo

  • Ganadero: Entre Ríos cuenta con 4,2 millones de bovinos. Con 40 000 animales en pie al año, podría facturar unos 120 millones de dólares adicionales y generar 3 000 puestos de trabajo rurales.
  • Logístico: cada buque genera 2 500 jornales de estiba y servicios portuarios.
  • Fiscal: los derechos de exportación siguen en cero, pero se dinamizan IVA e Ingresos Brutos vinculados a las operaciones.
  • Complementariedad: la faena local absorbe entre 65 % y 70 % del rodeo; la venta en pie apunta al excedente de machos y categorías livianas.

6. Desafíos y controversias

Organizaciones de protección animal piden auditorías estrictas, mientras la industria frigorífica teme presiones sobre los precios internos. El Senasa estableció:

  • Ventilación forzada en bodegas.
  • Espacio mínimo de 1,6 m² por cabeza.
  • Tiempo máximo de navegación sin descanso intermedio de 15 días.

7. Cronograma y próximos pasos

FechaHito
Agosto 2025Final de obra de corralones
Septiembre 2025Auditoría sanitaria de Senasa e Israel
Octubre 2025Ensayo de embarque en vacío y simulacro
Noviembre 2025Primer embarque a Israel (8 000 cabezas)
Enero 2026Primera rotación de envíos a Turquía y Vietnam

La Secretaría de Bioeconomía nacional prepara un manual de buenas prácticas para unificar requisitos en todos los puertos que deseen sumarse a este negocio.

Cierre

La reapertura del comercio de ganado en pie devuelve a la Argentina a un mercado que había abandonado hace más de medio siglo. Con calado natural, costos logísticos competitivos y controles sanitarios reforzados, el puerto de Ibicuy se proyecta como la puerta atlántica de un negocio que puede vigorizar la ganadería regional, generar empleo portuario y diversificar la matriz exportadora. El éxito dependerá de mantener estándares de bienestar animal, eficiencia logística y transparencia sanitaria: condiciones indispensables para que Entre Ríos consolide su nuevo rol en el mapa agroexportador global.